martes, 25 de marzo de 2008

El reto de ser joven en el siglo XXI

Libertad. Elección. Democracia. Conceptos que indiscutiblemente deben ir ligados y que, según la opinión de gran parte de la población, han ido perdido valor hasta tal punto que hemos decidido agruparlos bajo el término "política", abandonándolos en manos de algunos cargos, despreocupándonos de ellos tras cada votación, como si hasta dentro de cuatro años fueran ajenos a nosotros, ignorando así que la democracia, como cualquier otro proceso que implique el uso de nuestra libertad, forma parte de la naturaleza del ser humano, quien desde sus orígenes ha luchado por hacer oír su voz por encima de la injusticia y el autoritarismo para lograr así una sociedad digna para todos.

Esto nos hace ser conscientes de que aquello que llamamos política, junto a todo lo que significa y engloba, no se debe entender como algo lejano e incluso negativo, al contrario; todos debemos participar en ello, aportando nuestra visión e implicándonos para continuar el avance de esta sociedad inacabada que nosotros, como jóvenes miembros que de la misma, tenemos la tarea de llevar hacia delante. No podemos caer en la opción más sencilla y darle la razón a aquellos que dicen que la juventud de hoy está echada a a perder o que no puede conducir al mundo a nada bueno, puesto que ni siquiera es capaz de conducirse a ella misma.

Luchar contra tales prejuicios sin duda es la elección más difícil y la más gratificante. Nosotros no tuvimos la oportunidad de participar en aquel Mayo del 68, ni votamos la Constitución, pero si lo intentamos pronto nos daremos cuenta que sabemos más de política que nuestros antecesores; el legado que ellos nos dejaron, una sociedad libre, es impagable. Tras cada avance se esconde el nombre de alguien que tuvo que luchar antes que nosotros por conseguir aquellos de lo que ahora disfrutamos y que, años antes, era prácticamente impensable, pero no por ello somos una generación carente de ideales ni se nos ha dado todo hecho. Ante nosotros tenemos un reto aún mayor que el de nuestros padres y abuelos: continuar haciendo que la fiesta de la democracia que ellos consiguieron siga siendo posible en el futuro.

En ello encuentra sentido esta actividad; quizá por estos motivos me animé a presentar esta candidatura, y espero compartirlos contigo: las ganas de dejar de quejarnos de algo que en realidad desconocemos y a lo que estamos llamados, y de hecho tenemos la obligación de participar como es la elección de nuestras leyes y representantes; la conciencia de que en un simple voto van depositados todos nuestros sueños y esperanzas de progreso, por lo que lo debemos utilizar conscientemente y, por encima de todo, el deseo de demostrar que no somos la generación de la dejadez, la vida fácil y el aislamiento de la sociedad, sino la de la ilusión y las ganas de mejorar. Nadie dijo que fuera sencillo pero entre todos podemos lograrlo.


Cita: ‘La tarea de vivir en sociedad solamente se aprende viviendo junto con el otro, a veces nos tocara a nosotros pedir ayuda y otras será nuestra mano la que se extienda para ayudar, tratemos siempre de fomentar la esperanza y el amor y aceptar al otro tal como es. Solamente asi podremos crecer como sociedad’ - Cris Morena